COMO CUIDARIA USTED AL MISIONERO QUE ENVIA !!!

Publicado en por Pastor Hugo

 Amados espero que este artículo les sea de bendición.                                                                                                                           Reconocer lo importante que es para el misionero recibir ayuda pastoral de la iglesia que lo envía.  .

 

                                                                                                                                                  No debemos olvidar que el misionero es un miembro de la iglesia a quien Dios ha llamado a esta tarea específica.  Necesita del cuidado pastoral como cualquier miembro de la iglesia local que no está en el campo misionero.  La decisión de seguir a Cristo, obedecerle incondicionalmente, hacer su voluntad es la que está impulsando al misionero a irse de su tierra, a un pueblo donde no conoce la cultura, no habla el idioma, no comen la comida que el misionero acostumbra.  Esta decisión de seguir y obedecer a Cristo es profunda y seria.  Esto provocará en el misionero un desgaste emocional, espiritual, físico que puede ser peligroso si no le damos la atención pastoral que necesita, él y su familia.  Cristo dijo: “Os envío como ovejas en medio de lobos”.  Entonces el pastoreo de los misioneros no es un nuevo invento, sino que nace con la responsabilidad misionera que la iglesia tiene.

    El principio que guía la tarea misionera no debe ser el de las metas, los programas, o los resultados a costa de la vida y persona del misionero y su familia.  El trabajo de hacer misiones debe entenderse que la persona integral está en el centro del proceso de la gran comisión a la cual Dios la ha llamado.

    Hay que hacer diferencia entre cuidado pastoral y supervisión de campo y readaptación en el país donde va a servir de misionero.  Ambas cosas son diferentes.

I.  ¿QUÉ ES EL CUIDADO PASTORAL? 

El cuidado del misionero incluye varios aspectos:

1.                                                                 Provisión para sus necesidades especiales: espirituales, personal, familiar y ministerial.

2.                                                                 Guianza y asesoría en el desarrollo de su ministerio.

3.                                                                 Comunicación, amistad y compañerismo

4.                                                                 Visitación y cuidado especial en las crisis de su vida.

5.                                                                 Motivación y afirmación en su llamado misionero.

6.                                                                 Respaldo continuo en oración.

II.  ¿QUÉ ES LO QUE EL CUIDADO PASTORAL PERSIGUE?

Es ayudar al misionero a manejar adecuadamente las realidades de su vida diaria, entre las que se puede manejar lo siguiente.

1.                                                                 Vida espiritual.  Su relación personal con Dios, su vida devocional y la de su familia, luchas espirituales, tentaciones sutiles que le estén llegando por la naturaleza de su trabajo.

2.                                                                 Apoyo en el aspecto cultural.  El misionero está aprendiendo un idioma.  Está encarnando una cultura nueva a su vida, el choque de cosmovisión.  Todo esto arrojará una crisis a su vida, donde necesitará apoyo.

3.                                                                 En las relaciones humanas.  Relación con colegas, nacimiento de niños, disciplina de los hijos y conflictos matrimoniales.

4.                                                                 Físico.  Respecto a la salud.  Hay factores nuevos como la adaptación al clima, la comida que pueden traer trastornos en la salud.

5.                                                                 Psicológicos.  La estabilidad emocional, la autoestima y manejo de  sus emociones.

6.                                                                 Ocupacional.  Desafió y manejo adecuado de las presiones del trabajo, administación de su tiempo, metas y objetivos.

7.                                                                 Crisis.  Tiempos especiales donde el obrero necesitará atención especial, personal e inmediata.

III.  LA FALTA DE PASTOREO ES UNA DE LAS PRIMERAS CAUSAS DEL RETORNO PREMATURO DE LOS MISIONEROS

    La iglesia debe ver con mucha cautela el envió de obreros a los campos no alcanzados.  Debe tomar precauciones y evitar así dañar personas a quienes Dios ha llamado a la tarea, y provocar el retrazo en el alcance eficaz de los pueblos que no han oído el evangelio.  La necesidad del cuidado pastoral queda reflejado cuando vemos las principales causas por las cuales los misioneros regresan antes de tiempo.  En orden de importancia, algunas de ellas son:

1.                                                                 Falta de apoyo financiero.

2.                                                                 Falta de llamado.

3.                                                                 Compromiso inadecuado

4.                                                                 Desacuerdo con la iglesia que lo envía.

5.                                                                 Problemas de salud.

6.                                                                 Cambio de trabajo.

7.                                                                 Hijos

8.                                                                 Preocupaciones personales: Vida espiritual inmadura.

 El cuidado pastoral de los misioneros debe iniciar desde la misma base de la labor misionera.

 Es importante mencionar los elementos en que se apoya la obra misionera:

9.                                                                 El componente precandidato.  Incluye la movilización de la iglesia hasta la selección del misionero.

10.                                                             El componente capacitación.  Incluye la preparación de la iglesia, como la preparación eficaz teológica y transcultural.  (Preparación transcultural para que el misionero pueda adaptarse a otra cultura).

11.                                                             El componente campo.  Incluye apoyo, preparación de estrategias, acompañamiento, cuidado integral y la supervisión en el trabajo de campo.

IV. LA SUPERVISIÓN: OTRA ÁREA QUE INVOLUCRA EL PASTOREO AL MISIONERO

A. No podemos olvidarnos de los misioneros en el campo.  La supervisión de su trabajo es responsabilidad de la iglesia que envía.

B. El misionero necesita dar un informe confiable a su Iglesia.  Esto es bíblico (Hechos 14).  En nuestra época se puede hacer a través de teléfono, Fax, correo electrónico, etc.

C. Una buena supervisión traerá mejores posibilidades de cuidado pastoral.  Un misionero sin cuidado pastoral, tendrá pocas posibilidades de resolver sus problemas personales.  Si la iglesia se mantiene informada, estará más interesada.

D. Una buena supervisión evita un falso trabajo misionero.  Solamente porque el misionero pasó por tantas clases de preparación no significa que esté libre de la posibilidad de equivocarse.  Algunos llegan al campo, se frustran, no soportan las presiones, persecuciones y disturbios; se sienten avergonzados y no regresan a su país de origen, ni quieren conversar de lo que pasó.  Esto genera un falso trabajo misionero que trae por consecuencia frustraciones de las dos partes: de la Iglesia y del obrero.

E. Una buena supervisión hecha con amor a través de una visita al campo podría fácilmente traer luz de cualquier tipo de problema que esté afectando al misionero y darle solución con la ayuda de Dios.

F. Una buena supervisión promueve la capacitación de la iglesia en misiones.  Cuando la iglesia se da cuenta de las exigencias del campo misionero es desafiada a una mayor preparación para saber cómo enfrentar las diferentes situaciones en esta área.

V. LO QUE DEBE HACERSE CON EL MISIONERO AL REGRESAR DEL CAMPO

Algunas iglesias llaman a este tiempo, período de receso.  Si se trata de un período en medio de su ministerio, o sea, cuando vuelve a su país natal para luego regresar al campo.  Este período se da por los siguientes motivos:

A. DESCANSO.  Un misionero necesita descansar, junto a su pueblo, su cultura y su lengua.

B. RECICLAJE.  Tiempo para estudiar algún asunto interesante para él, o bien procurar un postgrado, lo que es un factor muy importante para su desarrollo intelectual.

C. DIVULGACIÓN.  Este tiempo es una excelente oportunidad para que el misionero comparta sus necesidades del campo con toda sinceridad a la iglesia que le apoya.

D. TRATAMIENTO MÉDICO.  La iglesia local debe cooperar con el regreso del misionero, proporcionando habitación, transporte, atención médica odontológica, descanso y preparando una agenda para que pueda ir a cada iglesia para hablar de su trabajo misionero.  La iglesia le debe proporcionar descanso emocional y espiritual.

CONCLUSIÓN

Muchos misioneros convencidos de su llamamiento, se han retirado de las misiones por causa de aquella iglesia que prometió apoyarle, pero que luego se olvidó de él.  Los misioneros, lejos de su país, familia e iglesia y olvidados por su iglesia, se llenan de dolor al pensar que no hay nadie que se interese por sus necesidades; y en consecuencia se sienten abandonados.

    El llamado es para el liderazgo de nuestras iglesias y nuestros pastores.  Si hay misioneros que salieron de nuestras iglesias ¿en qué medida y de qué manera les estamos apoyando?  ¿Hemos reconocido que ellos como personas y familias urgen de consejo pastoral?

Dios les bendiga 

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